lunes, 17 de mayo de 2021

Mi vida, mi histora


Epígrafe

Le consultaron al fundador de Dubai, Sheikh Rashid, sobre el futuro de su país, y éste respondió:


«Mi abuelo andaba en camello, mi padre andaba en camello, yo ando en Mercedes, mi hijo anda de Land Rover, y mi nieto va a andar de Land Rover, pero mi bisnieto le va tocar volver a andar en camello…»

¿Por qué?

«Los tiempos difíciles crean hombres fuertes, los hombres fuertes crean tiempos fáciles. Los tiempos fáciles crean hombres débiles, los hombres débiles crean tiempos difíciles.”

 Muchos no lo entenderán pero hay que criar guerreros, no parásitos 

Introducción

Por Lolo Morales

Soy Lolo Morales, nací en Managua, Nicaragua el 11 de diciembre de 1950, soy dueño de la mueblería Lolo Morales, empresa establecida en 1983, también soy dueño de la marca registrada Lolo Morales que data desde 1864, desde el tiempo de mi tatarabuelo don J. Dolores Morales del Castillo (Papa Lolo) quien la registró legalmente para usarla en todos los negocios que emprenderá en adelante él y su descendencia. He allí el origen de mi nombre comercial Lolo Morales.

 Los Morales hemos tenido muchas empresas a lo largo del tiempo (1864 hasta el 2021), Doscientos años de tradición empresarial , en la actualidad, soy el descendiente de V generación que lleva el nombre de sus ancestros.

 Lolo Morales, un día en el mes de enero de 1980 se vino del exilio en Guatemala a explorar lo que iba a pasar en Nicaragua después de que el FSLN derrotó a la dinastía de la familia de los Somoza.

 Me reencontré con mi Patria arrasada por una cruenta revolución.

 Tuve el deseo y la visión de invertir en mi país, fue lo que hice cuando puse mi primera tienda de mobiliario en el año 1983, bajo el nombre de Muebles Lolo Morales & Compañía Limitada, Tienda de Muebles de Oficina y el Hogar, la que estuvo ubicada en el reparto Serrano, dos cuadras al Este de la antigua embajada de los Estados Unidos.


 7 años después, en una vez instaurada la Democracia en mi país bajo el mandato de doña Violeta Barrios de Chamorro, me pasé a mis nuevas instalaciones ubicadas en cuatro casonas de la familia Pereira, ubicadas en frente al viejo estadio Cranshaw, sobre la Calle Colón.

 Luego, de la Calle Colón estuve ubicado en la calle 27 de Mayo, de las Cama Luna 1 cuadra al Este, en ese mismo año dos naves industriales en unos terrenos de 5,000 metros cuadrados ubicados detrás del plantel principal de la Alcaldía de Managua, en el Barrio Santa Ana a pocas cuadras del lago Xolotlán. El propósito de estas plantas era con doble propósito, una nave, la mas grande, fue diseñada para elaborar mubles finos de madera preciosa para el mercado euro´peo y la planta pequeña fue diseñada para atender la demanda de muebles en Nicaragua.

 Para el año 2007 construí un nuevo edificio ubicado en una zona más transitada sobre la Pista Suburbana a la altura del barrio San Judas donde actualmente tengo oficina, bodega y talleres, todo en el mismo edificio.

 Los años 80 fue una época muy difícil para vivir y para desarrollar empresas. Cualquiera que quisiera invertir en una empresa en esa década, sería considerado loco, a excepción de empresas tradicionales de gran capital que no habían sido expropiadas por el recién instaurado gobierno sandinista revolucionario, se le llamó a los años 80, “la década perdida” cuando aquí no había nada que hacer, había una escasez de todo lo indispensable para la vida y menos para los negocios, no había nada mas que pobreza y militarismo desmedido a alimentado por Cuba y la Union Soviética, todas la empresas estaban en poder de un Estado Socialista Marxista que se había apoderado de todos los medios de producción confiscados a los empresarios allegados al Somocismo, pero también se llevaron en la balastra a la gran la mayoría de empresarios decentes y trabajadores de Nicaragua, con las pocas excepciones de enormes grupos empresariales de vieja data que lucharon por conservar su patrimonio contra corriente navegando en un país totalmente totalitario y cubanizado. Cuarenta años después, en mero siglo XXI, seguimos bajo los mismos esquemas ideológicos, y así, bajo esas circunstancias no hemos dejado de luchar y aún en la actualidad continúo parado en la brecha.

 Si los grandes consorcios empresariales habían podido sobrevivir y mantenerse en el mercado bajo un sistema de control estatal absoluto, yo también podía lograrlo. Ese fue mi mayor reto y lo logré.

Esos grandes empresarios fueron una gran inspiración que me daba fuerzas y coraje para trabajar en un medio adverso a todas las intenciones de invertir en Nicaragua.

 Esa fue mi visión apoyada en la inspiración de mis antepasados de jamás rendirse a ninguna circunstancia en esta vida, por más difíciles que estuviera el entorno socio político del país.

 A mi regreso de la diáspora eterna de los nicaragüenses en el exilio por razones políticas, me reencontré con mi Patria y mis raíces y ya en la actualidad, cansado de trabajar, de aquí jamás me iré sino hasta que deje de existir. Aquí construí mi sueño y aquí me quedo, pase lo que pase.

Tengo 70 años cumplidos, aquí construí mi vida y sueño, en medio de crisis tras crisis.

 He pasado cuarenta de toda clase de crisis, en todas ellas, pude y supe adaptarme a los tiempos y resurgir con más fuerza, con más fe y perseverancia en todo lo que había hecho en mi vida hasta el día de hoy. Dentro de 5 años más me retiro definitivamente.

 Mis hijas continuarán con la tradición, no sé qué harán ellas, si seguirán fabricando muebles de lujo o se dedicarán a fabricar celulares, eso ya va a ser asunto de ellas. Mis dos únicas hijas maría Carolina y Ana Lucía Morales son profesionales con la mejor educación que le pueda dar a un hijo, formadas en Europa y los Estados Unidos. Mi misión y legado empresarial termina conmigo.

 Cumplí con mi meta y logré concluir la visión que una vez tuve cuando tenía 25 años. La marca registrada Lolo Morales a nivel mundial se las heredé a mis hijas para que continúen con la tradición empresarial de los Morales, son mujeres muy preparadas e inteligentes y estoy completamente seguro de que mantendrán en alto la bandera corporativa de mis antepasados, que fueron hombres y mujeres especiales, emprendedores insignes, gente ilustre, de trabajo duro sin cuartel y de lucha en toda clase de terreno.

 La honestidad, la responsabilidad y la perseverancia son los más altos principios que heredé de un pasado familiar incorruptible. Mi nombre de pila es Dolores (Lolo) Morales González, heredero de la marca, y pertenezco a la V generación de emprendedores de la familia Morales de Granada desde 1864 hasta el día de hoy, llevo acumulada sobre mis hombros 200 años de historia de empresarios honestos y luchadores.

 A continuación, les dejo l narración de mi vida e historia desde mi niñez en la ciudad de Managua, pasando por mi Juventud en la ciudad de Diriamba hasta llegar a mi madurez así como los aspectos vida empresarial en la ciudad de Managua.

 Legado que dejo a la generación de emprendedores que viene tras de mí. Y a todos aquellos que por una u otra razón me siento obligado a escribir mis memorias.

 Dedico esta narración a mi único nieto de 6 años, Jesse James Schartz Morales. El varón sucesor de la tradición de los Morales, actualmente viviendo y estudiando bajo la tutela de sus padres en la ciudad de Denver, Colorado, en los Estados Unidos de América.

 Managua 16 de Mayo de 2021.

Biografía


Dolores Morales González
, conocido en el ambiente empresarial y literario capitalino como Lolo Morales, nació a las 4:00 am, en el Hospital General de Managua, en la ciudad de Managua el día 11 de Diciembre de 1950, pesó 7 libras y media y atendio el parto el Dr. Fernando Vélez Paiz de grata memoria para los nicaraguenses. 

Sus padres fueron el recordado empresario Dolores Morales Bolaños, (*Granada Julio 1913 + León 20 de Septiembre de 1964) y de la recordada dama diriambina doña María Amanda González Baltodano ( * Diriamba 14 de Mayo 1915 + Managua 14 Enero de1995) Sus padrinos fueron el Dr. Jose Antonio González Baltodano y Doña Norita Cardenal de Castro.

Lolo Morales Bolaños y Maria Amanda Gonzalez Baltodano, padres de Lolo (Dolores) Morales González

Estudios

Lolo cursó el Kindergarden y la educación Primaria en el Colegio Calazanz de 
Managua desde los 5 años hasta los 12 años de edad mientras vivio con sus padres y sus cinco hermanos varones en la ciudad de Managua, Gilberto, Tony, Alvaro, Nacho y Javier. La familia se trasladó a vivir a la fresca ciudad de Diriamba en año 1962, dos años después fallece su padre en un accidente de transito en la carretera a León en las cercanias de esa ciudad Colonial el 20 de septiembre de 1964.
Dio su primera comunion en la Catedral de Managua el 12 de diciembre de 1962, siendo su madrina doña Norita Cardenal de Castro. 
 

Lolo cursó sus estudios Secundarios en el Instituto Pedagogico de Diriamba y se gradua en 1969 en la XVII Promoción de bachilleres en el mes de Noviembre de ese mismo año. 
Estudió Economía en la Universidad de Costa Rica en la Facultad Rodrigo Facio, en el año de 1970 . 

En el año 1972 ocurre el terremoto de Managua y se  tiene que venir a Managua a apoyar a su madre para levantar de los escombros la Lavandería y Dry Cleaning Tiscapa, una de las empresas mas prósperas y reconocidas en Nicaragua desde su fundación en el año 1941. Finaliza sus estudios univeritarios en la Universidad Centroamericana en el año de 1975 donde obtiene el titulo de Licenciado en Administración de Empresas. 

En 1977 cierra con su madre la empresa familiar en Managua y se dedica a atender con su hermano Alvaro la hacienda de café de su madre que había heredado sus abuelos abuelos don Marco Antonio González Solorzano y doña Josefa Dolores (Mama Lola) Baltodano Brown.

Lolo pasa su niñez rodeado de su familia paterna, los Morales Bolaños que habian emigrado desde jovenes de la ciudad de Granada ha emprender sus empresas en la ciudad de Managua que se levantaba en 1900 con un gran auge y vigorosa prosperidad. En el años 1910 su abuelo Ramón Morales Robleto se trasladó con sus hijos e hijas a la nueva Capital  a la orilla del lago Xolotlán. Y empiezó a desarrollar junto a sus hijos las empresas familiares de los Morales. La primera que construyó fue el icónico Club Social Managua.

Su juventud la transita en la ciudad de Diriamba donde hace buenos amigos y refuerza los lazos familiares con los demas miembros de su familia materna Los González Baltodano.






Su madurez la culmina en la ciudad de Managua donde finalizados sus estudios superiores emprende una vasta e intensa vida empresarrial y cultural que la mantiene viva hasta la actualidad. Su vida familiar es la culminación de su proyecto de vida que Lolo considera el má importante de su historia. Actualmente vive solo con su esposa Marisol Callejas Maltez. Su hija mayor, 
María Carolina Schartz casada con un ciudadno nortemericano, Jesse Schartz, actualmente vive en Denver Colorado, USA, Carolina le dio a Lolo su primer nieto, Jesse James Schartz y su hija menor Ana Lucía Morales Callejas, casada, vive en Managua con su esposo Fran lacayo y su segunda nieta Sofía.


Genealogía:

Vida familiar (sitio en construcción)

Enlaces de la Vida Empresarial (sitio en construcción)
Fotos familiares de los Morales González (sitio en construcción)
Fotos familiares de los Morales Callejas (sitio en construcción)

jueves, 14 de febrero de 2019

Cultura




El Macho Ratón y el Gueguense - Ptrimonio de la Humanidad


Breve Introducción

En las familias longevas siempre aparece por lo menos cada cien años algún artista, muchos de ellos lo son pero no todos llevan al papel o a la virtualidad tecnológica su ADN artístico por diferentes motivos que, en alguna medida se pierde en el vasto universo de las Bellas Artes.

Lolo Morales González es el artista, el poeta, quién desde su trinchera familiar y solitaria, ha parido innumerables poemas. Su arteria artística la desarrolló dentro del hermoso cuerpo de la Literatura; la Poesía, el oficio de componer versos, poemas que en el eterno tiempo por venir hablará sobre la calidad estética, la musicalidad de sus letras, la profundidad de su grito poético y su singular estilo de hacer poesía.


Reseña poética

   Lolo (Dolores) Morales González (Managua 11 de Diciembre de 1950). Poeta, publicista, diseñador y empresario de muebles finos de maderas preciosas nicaragüense. Publicó su primer libro de poesía ‘Güegüense mío y otros versos’, en 1998 (Comercial 3H S.A., 1998, pp. 61-63).
   
   Publicaba sus poemas en el semanario cultural 'La Luna Descalza' en Barricada en los años 80. Ejerció el oficio de poeta, publicando en la Revista Cultural Nicaragüense ‘Ojo de Papel’ junto a Mauricio Lacayo Barreto y el poeta Juan Chow, a finales de los 90's. En lo que va en los 2,000's publica en los semanarios culturales del diario La Prensa, La Prensa Literaria y Nuevo Amanecer Cultural  de El Nuevo Diario.

   Sus poemarios bajo el título ‘Colochos de mi taller’ en 2002 y ‘Solipsismos’ en 2005, y “Anhelo de un fauno en retiro” en 2012, además de una buena dotación de poemas inéditos y ensayos los ha publicado  en diversos periódicos centroamericanos, suramericanos y europeos, desde el 2005 hasta 2013.

   Publica libremente su Poesía Reunida (1968-2019) en su blog: http://lolomoralespoesia.blogspot.com  y tiene su página cultural las redes sociales en facebookhttps://www.facebook.com/PoetaLoloMorales y Twitterhttps://twitter.com/PoetLoloMorales donde Morales expone su obra poética, con el fin de darle a Nicaragua el rostro que una vez Pablo Neruda refiriéndose al bagaje poético Nicaragüense dijo que Nicaragua es “La garganta pastoril de América... ”

Morales se considera un poeta de la era cibernética, al respecto dice: "Después del internet, ya nada será igual. Puedo publicar todos los poemas que quiera libremente y mi público lee mil veces más mi poesía que si publicara sendas ediciones de libros, además que la gente solo lee lo que le gusta y se ahorra comprar libros caros para quizá leer uno o dos poemas de su preferencia. Me quedo en internet." 

  Coordinó el I Festival Internacional de Poesía de Managua 2012 dedicado a la memoria del poeta nicaragüense Álvaro Urtecho; en Managua del 26 al 30 de Noviembre de 2012 en el complejo cultural de la Alianza Francesa de Managua.

Crítica
 
De Morales, el crítico literario y poeta Álvaro Urtecho escribió: “Ya desde hace tiempo el gentil y dinámico Lolo Morales tiene un trato marcado por la identidad y la definición humanista del hombre en su más sincera y desnuda expresión, porque Lolo no se calla ante la opresión ni la injusticia social, horrorizado por la guerra absurda y por el hambre de los miserables. Así también dulcificado por el amor suave y correspondido, como enamorado que es de la vida”.

    El poeta Raúl Orozco escribió sobre la poética de Morales en 1998 “Con Güegüense mío y otros versos, entró en la bibliografía nicaragüense Lolo Morales y el vasto tiempo y la historia en él escrita, nos informarán de la suerte de éstos y de los demás versos que escriba”

   El poeta y crítico literario Iván Uriarte haciendo una valoración del libro de Morales “Anhelo de un fauno en retiro” dice: “Anhelo de un fauno en retiro, sorprendente poemario, que a partir de un referente modernista nos sitúa frente a la aldea terrestre de la globalización. Es probable que se trate de un fauno virtual, que a través de una búsqueda polifónica del lenguaje transgrede los tópicos más usuales de la poesía, esos que van del poema lírico a la protesta social, incorporando una visión del mundo que cuestiona todo credo religioso para refugiarse en la meditación oriental. La protesta social y política se convierte aquí en rebeldía, el amor en búsqueda erótica constante y el humanismo en identificación con los marginados. Poesía de discurso directo, sin partidos ni ideología ni religión, proponiendo un consenso más con el hombre mismo que con el sistema imperante del predominio político global. Quiere Morales ser el "Poeta contemporáneo", precisamente uno de sus poemas más intensos, donde el cuestionamiento del credo político o religión alguna es evidente: "El revolucionario vive del pasado/ tiene sus propios santos / Che, Marx Stalin Lenin Hitler Mussolini "... El contemporáneo se rebela contra las religiones / vive según su propia conciencia / vive conforme su propio evangelio / no se le arrodilla al papa / ni a los dalais lamas"

    El veterano escritor y columnista Manuel Aragón Buitrago escribe en el prólogo del libro de Lolo Morales “Anhelo de un fauno en retiro” lo siguiente del poeta: “Es guerrero incansable contra las injusticias, Quijote sin escudero, pero con la verdad como escudo y su palabra incandescente como lanza, cabalga airoso sobre el Pegaso de sus volcánicas iras. Cid Campeador o Quijote, da lo mismo, arremete contra moros y cristianos con su ígneo Verbo, sabe perfectamente usar el Logos, la Palabra, su artillería, es pesada. Ante el mutismo de los falsos poetas, el terrible alarido de Lolito clamando por justicia, porque vuelva a reinar entre los hombres el amor ausente que cual ángel bueno nos junte y nos envuelva con arrullos de paloma.
Yo consideraría a Lolito, y pido perdón por si exagero, émulo de Carlos Martínez Rivas, y quizá sea él el primero en rechazar este parangón, pues conozco su humildad y sencillez. “De todo lo escrito – dice Nietzsche – yo amo solo aquello que alguien escribe con sangre. Escribe tú con sangre: y te darás cuenta de que la sangre es espíritu”. Lolito Morales escribe con sangre.”  
  
   La frescura creativa y el dinamismo de Lolo Morales llega hoy con firmeza en su denuncia, en una época en que la sociedad se bate entre la revolución tecnológica y en una vida acelerada y vacía, los poetas nicaragüenses contemporáneos, o posmodernistas, entre ellos Morales, son los encargados de ser los nuevos profetas, los cantores de la vida, de la muerte, y del futuro en medio de un mundo fracasado y materialista.

Noviembre de 2012

Les invitamos a que recorran el sitio de poesía de Lolo Morales

https://lolomoralespoesia.blogspot.com/



domingo, 27 de enero de 2019

Una anécdota convertida en estandarte




Por el Doctor Joaquín Cuadra Chamorro

Doctor, en los 80 usted jugó un papel trascendental en varios aspectos, pero especialmente en la renegociación de la deuda comercial, a tal punto que se acuñaron varias frases de usted, una de ellas es: "Firmar me harás, pagar jamás". Cuánto de eso es cierto o es únicamente propaganda?

Hay algo de verdad en eso, cuando se decidió negociar la deuda con los Bancos, la deuda de los Somoza que le decíamos (alrededor de US$800 millones), el jefe del grupo negociador era Alfredo César, quien estaba muy precipitado por lograr un acuerdo antes de diciembre de 1979. Recuerdo que Richard Wayner fungía como asesor financiero, él era un financista bien inteligente y simpatizó muchos con nosotros, nos juntábamos en New York, en Washington o donde fuera.

Estábamos llegando casi por completar la negociación con los banqueros y sólo faltaba un tramo: qué tipo de intereses iba a reconocer el gobierno a los acreedores. Estábamos parados allí, en ese tema, ellos creo que pedían un 6/8 o 7/8 y yo les decía! Qué babosos que los veo a ustedes!, cualquiera que sea el interés, de todos modos no vamos a pagarles, ya que no tenemos de dónde agarrar reales para pagar eso.

El de la frase es Lolito Morales, quién siempre llegaba al Terraza, decía cuando firmaba la cuenta: "Firmar me harás, pero pagar jamás."

¡Pero es cierto que usted lo mandó a poner en una pluma?

No, no, fue Richard Wayner. Cuando llegamos a concluir la negociación, a cada uno de los miembros del equipo negociador de Nicaragua les regaló una pluma con esa frase grabada. Imagínate, una de ellas cayó en poder de los banqueros, y se armó el alboroto.




domingo, 20 de mayo de 2018

Fuerzas incontrastables: el final de la guerra civil de 1948




Teodoro Picado le cedió el mando a José Figueres debido a su temor de que la guerra se convirtiera en un sangriento conflicto internacional
 
Por: David Díaz Arias




Lolo Morales Bolaños (centro), Rosendo Arguello (izquierda), el Dr. Eduardo Conrado Vado (atrás) y dos directivos de la Legión Caribe en la hacienda La Lucha en 1948. Foto: Cortesía de Lolo Morales (hijo).
Lolo Morales Bolaños (centro), Rosendo Arguello (izquierda), el Dr. Eduardo Conrado Vado (atrás) y dos directivos de la Legión Caribe en la hacienda La Lucha en 1948. Foto: Cortesía de Lolo Morales González (hijo).

La guerra civil de 1948 comenzó el 12 de marzo y terminó el 19 de abril. En una carta fechada el 18 de abril, Teodoro Picado informó a Rafael Ángel Calderón Guardia y a Manuel Mora que entregaba el poder a José Figueres- porque “fuerzas incontrastables” lo habían presionado a tomar esa decisión. ¿De qué hablaba Picado?

Marines

Los rebeldes de Figueres se alzaron en la Lucha, tomaron San Isidro y luego se desplazaron hacia el sur de la capital. En un movimiento certero, tomaron Puerto Limón la noche del 11 abril y Cartago, un día después.

Al conocer eso último, en San José los comunistas decidieron integrar su propio Estado Mayor y convencieron a Calderón Guardia de participar activamente en las decisiones militares. Arnoldo Ferreto dice que el 14 de abril los comunistas reunieron 2.000 hombres en Tres Ríos para defender San José.

Luego enviaron 1.200 de esos hombres para tomar la capital y recurrieron a un militar español que había estado en el Sitio de Madrid (octubre de 1936-marzo de 1939) para pedirle consejo sobre cómo resistir en San José.

Según John Patrick Bell, los comunistas tomaron el aeropuerto de La Sabana y ciertos edificios y azoteas. En una carta a United Press, el peruano Víctor Raúl Haya de la Torre describió a Costa Rica como “la Checoslovaquia del hemisferio occidental”.

Pero Picado todavía tenía espacio para ganar la guerra. ¿Por qué capituló? Sin restar valor a los alzados costarricenses, una versión asegura que el miedo fue provocado por la noticia de que tropas estadounidenses invadirían el país.

Eso lo planteó en 1949 Ricardo Fernández Guardia en la última actualización que hizo de su cartilla histórica: “Se disponía el Gobierno a resistir en sus cuarteles de San José, cuando fue informado que en la zona del Canal de Panamá se aprestaba una fuerza del ejército americano con carácter de policía, a ser transportada al aeropuerto La Sabana para ponerle fin a las hostilidades, ya que se tildaba de comunistas al numeroso grupo de combatientes militantes del Vanguardia Popular”.

Con la autoridad de Fernández Guardia como historiador, la versión pronto se institucionalizó. Ya en 1955, Mora, Ferreto y Carlos Luis Fallas la anotaron como una verdad y muchos la han repetido hasta hoy.

Sin embargo, no hay evidencia al respecto y esa explicación no coincide con la actitud colaboradora del embajador estadounidense Nathaniel P. Davis durante la guerra civil. De hecho, el Departamento de Estado no hubiera amenazado con enviar marines a Costa Rica porque, gracias a Davis, sabía, desde el 13 de abril, que se estaban desarrollando negociaciones de paz.

Finalmente, una invasión de marines no coincide con un memorando que el Director de la División de Asuntos para Centroamérica y Panamá envió el 19 de abril a Managua, en el que le exigió a Anastasio Somoza desmentir cualquier acción de los Estados Unidos a favor de los insurrectos. También le indicaba a Somoza que los Estados Unidos no apoyaban su invasión a Costa Rica.




La tapa del libro de Teodoro Picado 'El Pacto de la Embajada de México, su incumplimiento' (Managua: 1949). Cortesía de David Díaz Arias.
La tapa del libro de Teodoro Picado 'El Pacto de la Embajada de México, su incumplimiento' (Managua: 1949). Cortesía de David Díaz Arias.

Anastasio Somoza
 

La otra versión es que Picado capituló para evitar esa invasión. Somoza se involucró en el conflicto costarricense desde el 15 de marzo, cuando denunció la ayuda del gobierno guatemalteco a Figueres. Con fundamento, temía que, al caer Picado, Costa Rica sería base para los antisomocistas.

El 16 de marzo, el Secretario de Seguridad costarricense visitó Nicaragua y regresó a San José con 35 exintegrantes de la Guardia Nacional. Al día siguiente, Somoza envío 20 guardias más a Costa Rica.

Como lo documentó Jacobo Schifter, para el 18 de marzo, Somoza había mandado 70 hombres y dos aviones AT-6 a Costa Rica. Además, según Kyle Longley, el 22 de marzo, la prensa estadounidense informó de que los comunistas tenían el control total de San José.

El 16 de abril, Picado, el doctor y Mora volaron a Puntarenas para encontrarse con Paco Calderón y con Vicente Urcuyo, embajador en Nicaragua. Allí, Picado supo que Somoza demandaba la protección de las fronteras y ofrecía ayuda.

Mora y el doctor se opusieron a ese plan, pero Picado le dio a Paco y a Urcuyo poderes plenos de negociación con Somoza. Ya en Managua, autorizaron al nicaragüense para que movilizara su guardia dentro de territorio costarricense.

Schifter asegura que Somoza estaba urgido de lograr el reconocimiento de los Estados Unidos y traicionó a Picado dándole la autorización al embajador norteamericano. Luego, invadió la zona norte de Costa Rica. Esa invasión, efectivamente, representaba un gran peligro, pero no por sí misma.




Una imagen del Desfile de la Victoria posterior a la guerra de 1948. Foto: Archivo de La Nación.
Una imagen del Desfile de la Victoria posterior a la guerra de 1948. Foto: Archivo de La Nación.

La Legión Caribe
 

En diciembre de 1947, Figueres se entrevistó con Juan José Arévalo, presidente de Guatemala, quien contaba con el armamento que procedía de una fallida invasión a la República Dominicana para derrocar a Trujillo. Figueres convenció a Arévalo de que Costa Rica era el lugar ideal para empezar la liberación del Caribe.

Al alzarse el 12 de marzo, lo primero que hicieron los seguidores de Figueres fue tomar el aeropuerto de San Isidro. Varias veces los aviones viajaron a Guatemala para transportar armas, hombres y combustible a Costa Rica.

En esos viajes llegaron miembros de la Legión Caribe, entre los que se puede mencionar a los dominicanos Miguel Ángel Ramírez (quien comandó el ejército de Figueres) y Horacio Ornes Goiscou, los hondureños Jorge Rivas Montes, Mario Sosa, Francisco Morazán, Presentación Ortega, Alfredo Mejía Lara y Francisco Sánchez, y los nicaragüenses Lolo Morales Bolaños, Jacinto López Godoy, Rosendo Argüello Jr., Francisco Castillo, Octavio Calderón, Dr. Gómez Rovelo, José María Tercero y Adolfo Báez Bone. Con ellos trajeron armamento suficiente para equipar a 1.000 hombres.

La Legión era un grave peligro para Picado. En su texto “El Pacto de la Embajada de México, su incumplimiento”, escrito en 1949 en Nicaragua, él detalla que el gobierno no tenía capacidad militar para enfrentarlos porque la vocación del país había sido invertir en educación.

Además, los militares del país no tenían el conocimiento ni el armamento porque Estados Unidos bloqueó los intentos para comprar armas, temiendo que las usaran los comunistas.

Picado escribió: “Al producirse la toma de Limón, tuvo… el Gobierno noticia fidedigna que en puertos antillanos se alistaban embarcaciones con armamento y refuerzos para la Revolución. Limón era otra puerta de aprovisionamiento y por ella habría penetrado una corriente incesante de apoyo para los alzados. El gobierno venezolano se inclinaba también en su favor”.

El Caribe generaba terror a Picado posiblemente porque se imaginaba al ejército fuertemente armado que había construido el dominicano Juancito Rodríguez y había entrenado en Cayo Confites hasta mediados de 1947 para invadir República Dominicana. De esa experiencia procedía la Legión Caribe.

Picado apenas contaba con el “ejército” de trabajadores vanguardistas, valientes y fieles, pero sin armas. Su temor justificado era que el conflicto costarricense se había convertido ya en una guerra internacional.

Anotó: “Prolongando la lucha se corría, además, el peligro inminente de convertir a Costa Rica en el teatro de un conflicto centroamericano”. Con eso, se refería a que Costa Rica sería el escenario de un enfrentamiento violento y terrible entre las tropas de Somoza y las de la Legión Caribe.

Imaginando el baño de sangre que de eso resultaría, Picado decidió capitular. Mora, por su parte, desmovilizó a los trabajadores. Al firmar el Pacto de la Embajada de México y el Pacto de Ochomogo creyeron que se cumpliría lo escrito. Los miembros de la Legión Caribe pensaron que seguirían contra Somoza. Todos estaban equivocados.

sábado, 3 de marzo de 2018

Entrevista de FORBES a Lolo Morales en 2014


Por Luisa Agüero y Alfredo Alvarado – FORBES MEXICO

Introducción


La capacidad para adaptarse a los cambios, adecuarse a las necesidades del mercado, pero sobre todo mantener la calidad de sus productos y servicios, ha hecho que estas 15 compañías hayan podido permanecer en sus mercados a lo largo de un siglo.
“Las empresas centenarias han modificado el entorno regional por su visión integral de calidad en toda iniciativa emprendida”, expresa Nelson García Lobo, director de la Comisión de Acción Social Menonita (CASM) y coordinador del Foro Social de la Deuda Externa de Honduras en San Pedro Sula (Fosdeh).

Ver 15 empresas centenarias en Centroamérica

Sus modelos empresariales han sido forjados a prueba de todo, pero su perspectiva es seguir evolucionando y consolidarse como precursoras en sus respectivos rubros. En el caso de Honduras, Comercial Larach y Banco Atlántida son dos ejemplos nacionales muy arraigados. La empresa familiar debe ser eficaz y competitiva, y como tal, debe adecuarse a las exigencias del mercado.
Para ello, afirma García Lobo, es fundamental promover la innovación, la competitividad de sus procesos, la eficiencia en su gestión, la motivación, el compromiso, la preparación de su personal, y la calidad de su liderazgo. En pocas palabras, reinventarse para sobrevivir “Toda empresa en estas circunstancias debe responder adecuadamente a retos específicos al ser una compañía familiar, por ejemplo, planificar el relevo generacional, el mantenimiento de relaciones fluidas entre familiares y no familiares, las decisiones relacionadas con la propiedad, la conservación del legado, el compromiso y el gobierno de la empresa”, agrega.
Que las 15 empresas de nuestro informe y sus marcas, sean emblemáticas no es para menos. Que duren 100 años de manera ininterrumpida en un entorno en constante evolución como el centroamericano, refleja el éxito económico de quienes desafiaron con creces el tiempo y los acontecimientos históricos.



 En el caso de Nicaragua, en la actualidad Lolomorales® es una marca registrada, es un conglomerado de negocios familiar que vende principalmente muebles de lujo de madera construidos a la medida. Especializados en la venta de mobiliario por medio de catálogos físicos y virtuales mediante sitios web, blogs y videos en las redes sociales de mayor impacto en la red global. 



¿Cuándo fue fundada la empresa, a qué se dedica?

Tengo 30 años de estar fabricando Muebles Finos de madera entre otros materiales hechos a la medida.
Siguiendo la tradición de mis antepasados, el matrimonio Morales Callejas formado por éste servidor y mi esposa Marisol no aventuramos y fundamos el 17 de septiembre de 1983 nuestra primera empresa de Muebles finos de maderas nacionales “Lolo Morales & Cía. Ltda” que lleva el nombre y la marca comercial de mis antepasados conservando el nombre de mi tatarabuelo Dolores (Don Lolo) Morales del Castillo, mi bisabuelo don Dolores Morales Arana, de mi tío abuelo Dolores (Papa Lolo) Morales Robleto y de mi padre don Dolores (Lolo) Morales Bolaños. Ver la historia de la familia Morales hasta la generación actual: http://www.lolomorales.com/p/historia.html

Nuestra especialidad es proponer nuestras colecciones propias de mobiliario construidos con maderas preciosas del trópico nicaragüense siguiendo las tendencias de la moda internacional del mueble contemporáneo de lujo para las capas socioeconómicas medias y altas en el ámbito nacional e internacional.
Nuestros muebles son fabricados a mano por diestros maestros ebanistas y artesanos de la madera con amplia experiencia y destreza de décadas.
LOLOMORALES® es una marca posicionada en el mercado nacional e internacional. Sus 25 premios a la Calidad y Prestigio Empresarial ganados en la última década confirman que la marca Lolo Morales® es sinónimo de Calidad y Prestigio.

¿Origen de sus fundadores, cómo surge la idea del negocio?

Las empresas de la familia Morales tienen su origen desde hace más de 200 años de antigüedad. Las familias son como los partidos políticos y las religiones, a través del tiempo sufren cismas, se dividen y se dispersan. Pero lo bueno es que también hay miembros de la familia que recogen las banderas y tienen el don visionario de sus antepasados emprendedores relevando y recreando exitosamente esas visiones manteniendo, ya sea por cultura, por pasión, por ambición, o por amor a todo lo que hacen, aquellas culturas empresariales heredadas de los abuelos. Los miembros que les van sucediendo con el don de emprendedores se capacitan muchas veces, otras veces no por diferentes motivos, pero los que resultan emprendedores intuitivos salen adelante con nuevas ideas, propuestas innovadoras y visiones para ir creando nuevas formas de producir, de innovar y de desarrollar nuevas empresas rentables y productivas, pero sobre todo quedando firmes bien paradas en la brecha a través del tiempo.  

¿A cuánto ascendía el capital inicial?

Si se refiere a la generación que yo represento (cuarta generación), comencé con un capital inicial de $ 1,500 dólares en el año de 1983. Mi familia sufrió confiscaciones de propiedades durante la década de los 80’s y los recursos en esa época eran muy limitados.

¿Cómo fue ese comienzo?

Fueron los años más difíciles de mi vida y de mi familia. En medio de una guerra civil que duró 10 años (década de los 80’s), Nicaragua se sumió en una postración económico-social jamás vista en su historia. Aquí no había  nada que hacer, nada que vender, nada que comprar, sin abastecimiento de materiales, los estantes de los supermercados vacíos, no habían herramientas ni maquinaria para emprender un negocio por pequeñito que fuera. Las capas sociales medias y altas estaban devastadas y los que pudieron, sacaron sus familias y sus capitales a países centroamericanos y los Estados Unidos principalmente. Yo decidí quedarme a luchar en mi país con mi esposa y una hija de dos años, porque nací con el don de ver tantas oportunidades como estrellas en el cielo hay.

¿Cuáles han sido los desafíos?

El primer desafío empresarial que tuve en mi vida, quizá el más grande de todos fue el de convencer a mi esposa que se podía tener éxito aún en el desierto, si uno se proponía a buscar el agua o petróleo donde todos creían que no había.
Me lancé a la aventura en medio de una situación de hiperinflación galopante y una escasez de lo más elemental para la vida del ser humano como el papel toilette y la pasta dental. Y al final de la guerra, en el cambio o transición de un país con un gobierno comunista y dictatorial, con una economía y una infraestructura destruida; en el año 1990 llegó la democracia y se dio una transición del poder político sin disparar un solo tiro.
Para esa fecha mi empresa en su ramo era la única, prácticamente un monopolio, con 5 distribuidoras de mobiliario y más de 30 talleres que me fabricaban todo tipo de mobiliario, combinando la venta de muebles hechos en Nicaragua con equipos y electrodomésticos usados (refrigeradoras y cocinas) traídos de Miami y Panamá, entre otras líneas de negocios de artículos usados y de segunda mano como la ropa de paca y las llantas usadas que en ese momento eran negocios de oportunidad, algo así como pequeños pozos petroleros.

Otro gran desafío que tuve que enfrentar en la década de los 90’s fue la de confrontarme y competir con las mueblerías de grandes capitales extranjeros y nacionales que estaban regresando para reconstruir Nicaragua y posicionarse en el mercado de mobiliario y electrodomésticos nuevos y de marca.

Aunque en 10 años la marca LOLOMORALES®  estaba bien posicionada como la mejor marca de muebles en el mercado nacional, competir con las transnacionales era como querer cazar un elefante con un rifle de balines.

Empresas transnacionales como la CURACAO, centroamericanas como ALMACENES SIMAN, y TIENDAS GALLO MAS GALLO, etc., que ponían sus productos al crédito con cuotas súper bajísimas, que además de ser caros debido a la enorme carga financiera que les aplicaban a los consumidores, eran muebles de mala calidad, traídos de China, que en apariencia eran bonitos pero no duraban más de un año. En un año, los muebles de los consumidores estaban dañados y todavía tenían que seguir pagando por unos muebles inservibles durante dos o tres años más. Aun así era imposible competir con esos monstruos financieros, por lo que tuve que reconvertir mi forma de hacer negocios y lo hice.
Mi capital de trabajo en ese entonces andaba alrededor de un millón de dólares, y en medio de la encrucijada de competir con los grandes capitales financieros europeos, nacionales y centroamericanos, o cambiar de negocio, opté por la de reconvertirme, me quedé con un taller élite y una pequeña tienda, me especialicé en fabricar a la medida muebles para gente de altos recursos dedicando también mis esfuerzos a colocar mi producción a otros países de ultramar, ya que Centroamérica estaba en guerra con economías de subsistencia, y bloqueados con los Estados Unidos.  

Como resultado de mi primera reconversión a finales de los 90’s ya estábamos exportando muebles a Ámsterdam, que era nuestro punto de entrada a Europa, con un socio allá que luego distribuía nuestros muebles a Inglaterra, Francia y Alemania. Salimos avante y creciendo como la espuma con las exportaciones a Europa. Y en el mercado nacional y regional ya éramos pioneros y líderes de los muebles dados  a hacer por encargo o muebles a la medida (Custom Furniture).

La fiesta de las exportaciones de muebles a distribuidores y tiendas en Europa terminó el 7 de agosto de 2000. El Banco Intercontinental S.A. (Interbank), “La Pirámide del Ahorro”, había quebrado. Interbank era el banco más grande de la época en mi país, ellos financiaban mis operaciones de exportación. Al quebrar Interbank quebraron siete bancos más, fue un efecto dominó de quiebras bancarias.
Sin financiamiento nacional, busqué dinero en Panamá y en EU, pero no pude conseguirlo debido a la mala fama del sistema financiero corrupto en mi país combinado a la mala fama de la administración gubernamental de la época del señor Arnoldo Alemán.
En consecuencia, al no poder cumplir con mis compromisos en Europa por falta de financiamiento bancario, y no poder competir con los grandes mueblistas financieros locales y transnacionales, me encontré en una nueva encrucijada; o me reconvertía nuevamente o llegaba mi fin como empresario de mobiliario fino de maderas nacionales.
Fue mi primera quiebra técnica. Me declaré en quiebra y di los activos prendados en dación de pago para dejar limpio mi nombre y el de mi familia, además de ser futuro sujeto de crédito el sistema financiero cuando los tiempos fueran propicios.
Con mis ahorros en efectivo, volví a comprar propiedades e iniciar una segunda fase de Muebles Lolo Morales®, levanté una nueva fábrica en terrenos marginales que luego adquirieron plusvalía, y comencé de nuevo sin perder clientela. Siempre hice las cosas de tal forma que nadie supo lo que realmente pasaba en el interior de mi empresa. Esta vez era más pequeño pero más eficiente y con mayor experiencia. Monté mis oficinas administrativas y una pequeña boutique en el casco viejo de la Managua antigua. Comencé de nuevo a invertir mis ahorros, a palanquearme con el sistema financiero local acumular capital y seguir compitiendo con mi estilo tradicional de hacer negocios.

Otro nuevo desafío. Se termina de nuevo la fiesta para mis negocios en el año 2008 tras la crisis financiera que quebró a los estados Unidos y al mundo entero, volví a ser afectado en mi estado de liquidez. La quiebra de negocios grandes y medianos en Nicaragua fue masiva con muy pocas excepciones como los grupos familiares antiguos. Había que hacer algo. De nuevo me encontré en la encrucijada. Con una economía en crisis, con la demanda de mobiliario en su punto más bajo, si seguía operando con pérdidas, seguro que desaparecería más temprano que tarde; o me reconvertía o desaparecía del mapa.
Mi estrategia para salir del atolladero: Declararme nuevamente en quiebra técnica.
Di en pago los activos menores o corrientes sin afectar las propiedades ni el patrimonio familiar que estaba intacto. Limpié mi buen nombre y tuve una vez más que resolver el dilema de terminar con el negocio de los muebles o reconvertirme y buscar una salida airosa.
Mi esposa me dijo una vez cuando yo le pregunté que hacíamos ante tal situación: “Zapatero a tus zapatos”- me dijo ella enfáticamente-, “si fuiste el rey en los 80’s,  los 90’s, y los 2000’s podés ser el emperador en tu ramo en la primera década de los años 2000 y las que vienen”. Y así lo hice, me reconvertí nuevamente en rey y salí airoso.

Me dediqué a hacer lo que la competencia no hacía: Muebles a medida (Custom Built Furniture). No fue muy difícil hacer la reconversión, ya LOLOMORALES® era para ese entonces una marca posicionada de dos décadas en el mercado local y los consumidores fieles a esa marca, siempre confiaron en la calidad de los productos que nuestros clientes nos encomendaban construir, especialmente el nicho de mercado “nostálgico” residentes en Estados unidos así como una nueva y creciente clientela de norteamericanos de EU y nicaragüenses que habían emigrado a España por la escasez de trabajo en Nicaragua.

En la actualidad manejo exitosamente 20 líneas de mobiliario en la modalidad de Custom Made Furniture, o muebles hechos por encargo a la medida. Poseo un cluster productivo de talleres que me trabajan outsoursing y me dan servicio de maquilado. Poseo un workshop principal donde hago mis negocios y atiendo a mi clientela local. Manejo mis negocios desde mi hogar en mi pequeño estudio, exporto muebles de madera fina a Estados Unidos a familias nicaragüenses, estadounidenses, y a tiendas pequeñas y medianas que revenden mi producción por pedido y “a medida”. Actualmente soy el líder nacional y centroamericano debido a mi forma flexible de producir y de hacer negocios. Vendí las propiedades marginales antes de mi última reconversión en buenos precios a finales de los años 2000, e invertí en nuevas propiedades en zonas de gran plusvalía. Ver http://www.lolomorales.com

¿Cuántas generaciones van asumiendo las riendas del negocio?

Llevo con la mía cuatro generaciones de empresarios bajo la marca registrada LOLOMORALES®. 
La marca lo es todo. Mis antepasados emprendedores que usaron la marca Morales, generalmente tuvieron éxito. Pero a la marca patrimonial LOLOMORALES®  con cuatro lustros de estar sonando en el ámbito empresarial, ninguno de mis familiares le puso mente. Yo la recogí, le pinté el rostro, la activé y hoy me beneficio exitosamente de ella. Una vez les propuse a mis hermanos unirnos y aunar esfuerzos para logar formar una corporación familiar y me vieron como loco.
Me puse en acción, renové la marca y la registré por cien años más bajo las leyes de la RPI (Registro de la Propiedad Intelectual de Nicaragua) y de los tratados de Viena en materia de derechos de Propiedad Intelectual.
Hoy es la marca de mayor renombre y prestigio en muebles a nivel nacional y regional, además de ser altamente reconocida en el ámbito internacional que he emprendido en mi país. Si abro una venta de cualquier producto con la marca LOLOMORALES® detrás de ese producto; los consumidores exclaman: “-Ah!-, eso lo vende Lolo Morales®, entonces debe ser bueno” y los compran. El precio es importante, pero la marca lo es todo.

¿Qué ha significado el traspaso generacional?

Es una experiencia única. La educación que nos dieron fue importante, pero no lo más importante.
Lo más importante es haber nacido con el don de ser un entrepreneur en un entorno familiar con cultura empresarial. Los emprendedores somos una especie aparte, única. Se nace emprendedor.
Ser un emprendedor es una habilidad innata en el ser humano; es la ley evolutiva del más fuerte, es una destreza natural de saber cómo, cuándo, y donde establecer un negocio determinado, es como haber nacido con un sexto sentido. Y eso no lo enseñan las universidades por más prestigio que tengan. Ese don no aparece en ninguno de los libros de Administración de Empresas que he leído en mi vida.
Una cosa es tener excelente memoria, saber matemáticas, ser muy inteligente, poseer recursos económicos y sacar notas cum laude en las universidades; y otra cosa muy diferente es tener el “olfato” necesario para hacer negocios que sean rentables y exitosos en el tiempo, y también para salirse en tiempo y forma de los malos negocios y de las crisis económicas locales y mundiales tan frecuentes hoy en día. Lo que quiero decir es que un título no hace a un entrepreneur. Pero también es cierto que un entrepreneur con un título tiene un mejor desempeño empresarial.


El traspaso generacional exitoso es aquél que se da en los entornos familiares con cultura empresarial, provenientes de ancestros amantes del trabajo organizado que heredan a sus hijos con su ejemplo esa cultura de amor al trabajo y al emprendimiento empresarial. Las buenas relaciones entre los miembros de la familia con cultura de empresarios es un legado, es una herencia. En una familia con cultura de ahorro, de inversión y de desarrollo humano, no pueden haber malos administradores, pero eso sí, no todos serán líderes empresariales.
En mi caso particular, yo siempre me inspiré en mis abuelos, en mis padres, mis tíos y tías que marcaron la diferencia en mi país y de quienes heredé  el mejor capital que en este mundo inseguro alguien puede llegar a tener. La cultura del trabajo organizado y el don de ser un auténtico entrepreneur.

¿Mantiene vigente el rubro inicial, ha cambiado o se ha diversificado?

No solamente he mantenido el rubro inicial, sino que lo he reconvertido y ampliado a la máxima expresión, ha sido un largo camino, duro y difícil pero lo he logrado.
Los muebles de maderas preciosas son caros y las tiendas producen muchas pérdidas debido al enorme capital ocioso y personal de ventas que consume recursos y generan excesivas cargas financieras, fiscales, sociales, y administrativas que son onerosas para las formas actuales de hacer negocios. No tengo tiendas físicas, solo talleres 100% productivos. Mis tiendas están en la web, he invertido mucho tiempo y recursos en tecnología. Uso el sistema de multimedia testimonial y cuelgo en mis canales multimedia y sitios web especializados todos mis diseños y trabajos que voy realizándole a toda mi selecta clientela.

Utilizo como herramientas básicas el teleworking y el telemarketing desde que apareció el Internet, utilizo los nuevos sistemas de publicidad y ventas por internet a través de website, blogs, y las redes sociales de mayor impacto mundial.


El 90% de mis ventas, los catálogos, la creación y el diseño de productos, y resto de documentación de negocios los proceso con software avanzado y  evacúo por internet toda la documentación de negocios. La empresa familiar ahora es 100% músculo y 0% colesterol.

¿Cuántas empresas son ahora y cuáles?

En mi staff ejecutivo trabajamos actualmente mi esposa y yo. Mis dos hijas, la mayor de ellas representa la empresa en Estados Unidos bajo una oficina de negocios Harmony Integration (Sistemas electrónicos para residencias y oficinas controlados mediante dispositivos móviles) registrada en Denver, Colorado, y la otra en Nicaragua es la Asesora de Marketing y Relaciones Públicas de la empresa. Tengo de socios a mi esposa, mis dos hijas, mi único yerno y mi nieto.

¿A cuánto suman los activos?

Pasemos a otra pregunta.

¿Piensan en trascender sus fronteras?

Eso pensaba dos décadas atrás. Hoy ya trascendí las fronteras. Solo exportar a China me hace falta para cerrar el círculo, aun lo veo difícil, pero no imposible. Mi plan de retiro e vender mi marca y activos a una corporación china o extranjera que desee comprara una marca o un negocio de dos lustros de existencia y ampliamente reconocida regional y globalmente.

¿Cuáles son las cifras de producción o servicios?

Pasemos a otra pregunta.

¿Cuál es ahora el principal reto?

Seguir vivo para continuar innovando, creando nuevas formas de producir con calidad, eficiencia y de hacer negocios inteligentes aprovechándome de las oportunidades que la existencia me regale.

¿Cómo avizora el futuro de la o las empresas?

El mejor tiempo que existe es hoy. Lo que hoy no pueda hacer, quizá nunca pueda llegar a logarlo. El clima de negocios de un país y las correlaciones de fuerzas de la economía global y la geopolítica mundial, solamente son indicadores para tomar grandes o pequeñas decisiones en inversiones futuras, nada más. Las crisis son mentales y el futuro no existe, y el pasado solo existe como referencia para no cometer los errores de vieja data. El espíritu humano es indoblegable. Nadie puede contra ello. Mi olfato de entrepreneur es el Oráculo que yo consulto  a diario para tomar decisiones de negocios y de emprender nuevas empresas.

¿Tiene anécdotas especiales?

Una vez en 1983, un 19 de Julio me fui a curiosear a una enorme manifestación a la plaza de la Revolución en Managua. Había unas 300 mil almas en la plaza coreando consignas políticas revolucionarias. Yo estaba en un lugar alto mirando aquella masa gigantesca de gente. De repente una idea asaltó mi mente, como un delicioso susurro que una voz interior me hablaba:

“Hombré Loló, estamos en medio de una situación de guerra, este es un estado marxista-comunista, el gobierno tiene que darles trabajo a toda esa gente. Los comunistas son burócratas improductivos. Toda esa gente, cada uno de esos miles van a necesitar un escritorio, una silla, dos sillas más para recibir gente, un sofá, un activador, una refrigeradora, un comedor,….etc, etc.”

Luego comencé a multiplicar, a multiplicar y en mi mente solo escuchaba un ruido como el que hacían aquellas máquinas registradoras de los años 50’s y los 60’s…- chilínnnn, chililínnn, chichín, riinnngggg-….jejeje, se me quería reventar el cerebro.

Inmediatamente averigüé quienes hacían muebles localmente,  me di cuenta que los dueños y magnates de las grandes mueblerías antes de la Revolución Sandinista de 1979 se habían ido a Miami y se habían llevado el capital, solo quedaron los edificios semi-destruidos y vacíos.
Al día siguiente conseguí mil dólares y me fui a Panamá, porque estábamos bloqueados con los gringos, y me traje un paquete de herramientas para carpintería que di en arriendo a unos pequeños talleres que estaban quebrados y los puse a construir escritorios y sillas.

¿Quién fue tu primer cliente?

Tengo tan presente el día en que me fui a visitar al jefe de abastos del Ejército Popular Sandinista y le dije que tenía escritorios de venta y le enseñé unas fotos. Cuando vio las fotos de los muebles, golpeó la mesa y exclamó: “¡Justamente es lo que necesito!” – quiero que para el lunes me pongás 500 escritorios y mil sillas”….casi me muero del susto. Yo le dije que no había madera para tantos escritorios, y el inmediatamente me preguntó qué era lo que yo necesitaba. Allí mismo le hice la lista de materiales, luego inmediatamente me extendió una orden para que retirara de las bodegas todo el material que necesitaba para construir semejante cantidad de mobiliario. No me preguntó por los precios. Humildemente le dije al comandante que si quería saber el monto de la factura, a lo que él me contestó con voz de trueno y mando: “Vos no te preocupés, pásame la cuenta y nada más, que yo te la firmo para que Proveeduría te haga el cheque. La victoria se paga al precio que sea, me has salvado, - ¡Ah! y hacerme 100 camarotes dobles de pino con sus colchones de borra de algodón,”  esas fueron sus últimas palabras.
En menos de una hora yo estaba nuevamente ante el comandante de abastos del EPS para que me firmara la autorización de la proforma sin ponerme mucha mente debido que estaba hablando con otros comandantes mientras se fumaba un oloroso habano, me autorizó apresurado la proforma, como queriéndome despachar para que me fuese a hacer los muebles. Ni corto ni perezoso, inmediatamente después de Abastos me fui a la Proveeduría a que me sacaran el cheque, que era como de más de diez dígitos, en ese tiempo había una tremenda inflación. Al salir de las oficinas del estado, no me podía contener de la alegría.
Ese fue apenas el comienzo. Me pasé repitiendo la misma operación durante casi ocho consecutivos antes de que terminara la guerra civil de Nicaragua.

¿Cómo convertía los córdobas devaluados en divisas frescas?

 Convertía los “chancheros” (moneda nacional devaluada) en “lapas verdes” (dólares de los Estados Unidos de América). Cuando cobraba los cheques en moneda nacional, me iba a las casas de cambio autorizadas por el Banco Central para comprar divisas a precios bajos y así pude ir adquiriendo materiales, materias primas y maquinaria que aquí nadie las distribuía. Había un solo fabricante (yo), y un solo cliente (el estado).
Al final de la guerra y al venir la democracia en 1990, trajo con ella el ordenamiento de precios y los competidores, se había acabado la fiesta de estar solo en el mercado, pero para ese entonces ya era el rey del mobiliario fino en Nicaragua, con una marca bien posicionada, y con un capital estable. Valió la pena haberme quedado en mi país durante los años de guerra. En mi caso no hubo nada de contactos, ni de palancas ni de padrinazgo con nadie. Lo mío fue una visión que tuve, y la eché a andar sin miedo, arriesgándolo todo, y al final le vi las casitas al pueblo y alcancé el éxito deseado. Otros empresarios nicaragüenses de otras ramas de la economía que se quedaron en el país durante la guerra, se la jugaron de forma similar a la mía y hoy son magnates de la industria y del comercio, pero a otros no les fue bien del todo.

¿Tiene programas de Responsabilidad Social Empresarial, cuáles?

Somos mundialmente reconocidos por la WWF. Tenemos una auditoria de clase mundial con la FSC (Forest Stewardship Council) a través de SmartWood, una de las empresas afiliadas de la FSC, que nos auditan la madera que consumimos año con año, con el propósito de garantizar a nuestros clientes y a la sociedad de que usamos madera de origen certificado, secada al horno proveniente de plantaciones y bosques manejados con Sustentabilidad y Responsabilidad Ambiental. Es lo que llaman el ‘Sello Verde’ o ‘Green Seal’ equivalente a las normas ISO en la industria general. La auditoría abarca el trato hacia nuestros empleados y la forma con que manejamos nuestros desperdicios fabriles, los cuales son reciclados o enviados a plantas de procesamiento de abono orgánico una parte y otra parte los repartimos a los miembros de nuestro cluster que los utilizan como combustible orgánico para procesar alimentos. Nuestra empresa es una industria limpia y amigable con el medio ambiente. Nuestro programa social de apoyo a los más necesitados es reconocido en Nicaragua. Apoyamos anualmente con pupitres y muebles escolares a escuelas de primaria de niños de padres de bajos ingresos, así también como otras obras de caridad y solidaridad humana.

¿A qué factores considera que no hay una equitativa distribución de la riqueza en Centroamérica, en general?

Desde mi punto de vista los factores más grandes que obstaculizan el progreso y la erradicación de la extrema pobreza en nuestros países centroamericanos es la corrupción gubernamental generalizada, el narcotráfico, y sobre todo la falta de visión de los estadistas centroamericanos que no logran apartar sus intereses y vanagloria particular en pro de ver una Centroamérica unida, sin fronteras, como una sola nación y una sola moneda. Solo unida Centroamérica, será capaz de confrontar los grandes retos y desafíos que se le vienen encima. No hacerlo es condenar a las generaciones que vienen al atraso, a la migración de talentos a otros países, y a la continuidad en el tiempo de la extrema pobreza. Si Europa pudo unirse, un conglomerado de muchos países con idiomas y culturas diferentes, ¿por qué cinco o seis pequeños países que tenemos raíces comunes y hablamos el mismo idioma todavía vivimos peleando entre nosotros y no somos capaces de dar el paso hacia la unidad centroamericana que todos anhelamos?

¿Qué ha representado la familia en todo el trayecto de existencia de la o las empresas que representa?

La familia lo es todo. Aunque los miembros muchas veces no se ponen de acuerdo, es mucho más fácil convencer de los errores a un hijo, una esposa o un hermano que a un amigo o un extraño. La familia es como los cimientos de un edificio. Si esos cimientos son fuertes y hechos de buen material. No existe terremoto o vendaval que lo derribe.

¿Tiene algunos consejos para aquellos que han emprendido el camino que una vez usted y su familia iniciaron y que hoy coronan con éxitos?

Solo puedo darles mi receta de cómo se cocina el éxito empresarial. Antes que nada, primero se tiene que ser un entrepreneur, haber nacido con ese don. Ser entrepreneur es ser alguien que posea un espíritu de lucha indoblegable, que aunque fracase mil veces sea capaz de levantarse otras mil veces y seguir adelante hasta que encuentre la salida. La palabra éxito es originaria de la palabra griega exodus que significa ‘la salida’. La vida está llena de encrucijadas, y en los negocios, los entrepreneurs son los que llevan la ventaja sobre el resto de los competidores.

El emprendedurismo es un arte y los emprendedores son verdaderos artistas. Para tener éxito en todas las empresas de la vida primero se tiene que amar todo lo que uno hace. Nadie puede crear lo que no se ama. Ser constante, perseverante, permanecer siempre alerta aun en medio del sueño, muchas veces en los sueños aparecen las mejores ideas de negocios, en mi caso la mayoría de mis negocios exitosos han salido de un sueño.
Cuando te venga una visión en medio de un sueño, no sigas durmiendo, levántate, toma una pluma y escribe las notas de tu visión, escribe el contenido neurálgico de la misma, después puedes continuar durmiendo aunque no sigas soñando. Al día siguiente con la mente despejada desarrolla tu visión y échala a andar.

Los fracasos no son más que los peldaños de una escalera que te llevará al éxito. Debes de recorrer esa escalera aun así te lleve diez o cien años llegar a ella, así lo hicieron Henry Ford, Thomas Edison y Abraham Lincoln.
Si quieres triunfar primero es necesario fracasar. Los grandes hombres y mujeres exitosos en la vida, tuvieron un comienzo difícil y fracasaron muchas veces antes de coronar el éxito. El éxito no es algo que se compra ni en las farmacias, ni en la universidad ni en el mercado, el éxito es una actitud ante la vida.
Sean arriesgados, la vida es un correr riegos segundo a segundo, es una lucha constante ante los retos y desafíos que la existencia nos pone. No conozco ningún hombre que haya tenido éxitos sin tomar grandes riesgos. Si no quieren tomar riesgos, mejor quédense en su casa y no salgan del cuarto.
LOLOMORALES ® siempre se enfrenta en cada producto que desarrolla con la misma paradoja: transitar del pensamiento creativo a partir de elementos reales hasta concluir una perfecta y total obra de arte.
Es poesía hecha realidad. Por eso, y en vista del éxito, a partir de las ideas de nuestros clientes siempre nos mostramos receptivos a otras ideas, desafiamos lo asumido, asumimos los riegos, nos basamos en otras ideas para hacer mejores ideas, sacamos partido de lo inesperado, y aprovechamos siempre todas las oportunidades que se nos presentan.
Y después de todo este proceso infernal, el producto final se reviste de una misteriosa belleza que funciona en el mundo real para personas reales, que satisfechas siempre regresan a nosotros. ¿Alquimia, magia, exorcismo? No, sencillamente que 2 y 2 hacen 22 y no 4. Poesía de nuestra época.

¿Qué representa Dios en su vida y en la vida de las empresas?

El concepto de Dios en mi mentalidad, quizá no representa lo mismo que para un cristiano, un judío o un budista. Porque en occidente a Dios se le representa como un viejo canoso fornido y bravo, a veces amoroso cuando los humanos se portan bien y otras veces cruel, especialmente con los que no son de su pueblo, y cuando sus hijos se portan mal se pone furioso y manda desastres a la tierra para que enderecen sus caminos.
Tampoco Dios para mí no representa la Nada ni el Nirvana, por eso es que en los países orientales como la India no hay más gente exitosa que en los Estados Unidos o en Occidente. Mientras los unos crean, producen, trabajan y progresan, los otros se pasan meditando el resto de sus vidas.
A Dios yo  no lo busco fuera de mí porque él es parte intrínseca de mí ser, lo llevo dentro de mí. Y si tiene cara, lo puedo ver cuando me miro en el espejo, porque Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza y como él es Creador, también me hizo a mi creador en pequeña escala, así que mi único y principal oficio y meta en ésta vida es la de crear empresas, innovar, diseñar nuevos productos, y hacer nuevos negocios para que se beneficie mi familia y mis trabajadores contribuyendo de esa forma a la creación de riqueza de mi país.
El que tiene a Dios dentro de su interior, no puede pensar en maldades ni en vicios, solo en crear riquezas para el beneficio de uno mismo y de la sociedad. Mi religión es la creación de nuevos proyectos para el beneficio y la sobrevivencia de la especie humana.
Dicen que ‘Dios es Amor’, si a mí me dieran a escoger con cuál de los dos me quedo, escogería al Amor, que es el bálsamo perfecto que une y hace que la especie humana progrese y no se autodestruya.